chauuu!

amiga. amigo.

me fui a dar una vuelta y tomar un poco de aire

felizmente puedo decir que le puse sal a mis vacaciones!

 ahora me tomo un pequeño descanso para poder degustarlas

pero volveré-

gracias por acompañarme,

te mando un gran abrazo!

que sea con sal. con mucha mucha sal!

    esa canción que en su momento amabas te taladra la cabeza por trigesimocuarta vez consecutiva. tirás uno, dos, tres y hasta un cuarto manotazo. finalmente, totalmente a las puteadas, lográs apagar el despertador del celular. estás harto. estás cansada. de hecho te sentís como si ni hubieras dormido. pensás que podrías dormir eternamente; que, de hacerlo, serías la persona más feliz del mundo.
     recorrés con tu pensamiento el día que tenés por delante. nada más ni nada menos que una eterna jornada de estudio. encierro. sufrimiento. una más. otra más. y lo peor de todo es que dista de ser la última.
    la estás pasando tan mal que se te cruza por la cabeza, una y mil veces, colgar todo y patearlo para febrero. o julio. quién sabe. tu única certeza es que no das más. no podés más. tu cabeza ya no funciona como antes. y, encima, algunas notas ni siquiera te acompañan. fue un año largo. duro. desgastante. sí, esa es la palabra. fue un año desgastante. muy desgastante.
    tu cuerpo se resiste a despegarse de la cama. tu cabeza también. pero tu conciencia todavía lo duda. VOS todavía dudás. una vez más, por trigesimocuarta vez consecutiva, tenés que tomar una decisión. en este momento darías lo que fuera por no tener que entrar en esa maldita negociación de cada mañana. realmente tu cuerpo y tu cabeza están gritando basta. cada día más y más fuerte. basta. basta. basta. basta. BASTA!
    pero hoy te animaste otra vez y lo volviste a enfrentar. ya estás acá. levantada. despierto. son las 10 de la mañana. o las 3 de la tarde. tal vez las 9 de la noche. la hora que quieras. más por inercia que otra cosa, hoy volviste a sentarte en una silla y te pusiste a estudiar. pero tu cansancio es casi insostenible y todo el tiempo pensás: "¿hasta cuándo?¿cuánto más? necesito VACACIONES YA!" 
    y como si este sufrimiento fuera poco, sabés que mañana, por trigesimoquinta vez, vas a tener que tomar otra vez más la misma decisión. estás en el límite. "mañana largo todo", pensás. "mi plan se corta acá. realmente necesito VACACIONES YA. necesito DISFRUTAR", te justificás.
    ayayayay. pensalo dos veces. te invito a reflexionar...
    seguramente tengas razón cuando decís que no podés más. de hecho te creo cuando gritás que no tenés de dónde sacar más energía. también es verdad que estás cansada y harta. estresado y totalmente desbordado. pero pensalo dos veces. bajar los brazos justo acá ¿es esa la mejor decisión que podés tomar? yo pienso que no. de hecho pienso que es la peor. dejame explicarte por qué.
    hoy tenés mucha hambre de vacaciones, tu comida preferida, y tenés dos opciones: comerlas así como están o bien ponerles sal y disfrutarlas mucho mucho pero mucho más.
    si colgas todo ahora y lo pateás para febrero o julio vas a tener tus merecidas vacaciones. y seguramente las vas a disfrutar como nadie. pero te aseguro que si decidís hacer el último esfuerzo, el ÚLTIMO, y elegís dar todas las materias que te habías propuesto, cuando lleguen tus vacaciones vas a disfrutarlas mucho más. MUCHÍSIMO MÁS! con una sonrisa que absolutamente nadie, NADIE, te va a poder quitar.

    entonces, te invito a que no decidas mañana. podés decidir hoy y evitar tener que hacerlo cada mañana. DECIDÍ HOY. AHORA. YA! elegí hoy levantarte todos y cada uno de los próximos días que tengas que estudiar. ELEGÍ HOY ponerle sal a tus vacaciones!

    un último consejo. si en los próximos días ves que estás por bajar los brazos una vez más, mirá para adelante, mirá tu meta, y no todo lo que te falta recorrer. porque si bien todo lo que falta quizá sea un montón, demande un gran gran esfuerzo, y pienses que no lo vas a poder lograr, pensá también que llegar a esa meta, que rendir y pasar esa próxima o próximas materias que te propusiste, cuando el primer día de tus vacaciones finalmente haya llegado, te aseguro, ese esfuerzo va a haber valido total y completamente la pena. no te ahogues en un vaso de agua. mantené tu mirada fija en tu meta. VALE LA PENA!
    VAMOS! es el último gran esfuerzo del año. sé que vos podés. sabés que vos podés. repetí conmigo...

yo puedo

yo puedo

yo puedo

yo puedo

YO!

PUEDO!

 

YO QUIERO PONERLE SAL A MIS VACACIONES!

para leer una y mil veces

    A continuación te comparto algunas frases que siempre intento tener presentes...

    "Cuando leemos las palabras de quienes son más que vencedores, nos sentimos casi perdedores pensando en que nada podremos lograr. Pero ellos lo alcanzaron paso a paso, empleando la fuerza de la voluntad, logrando pequeñas victorias y permaneciendo fieles a su ideal. Cuando llegan adonde están nadie considera lo que pasaron. Solo aprecian lo logrado sin saber cuanto les ha costado. Pero no existe un triunfo repentino ni una madurez espiritual que sea producto del azar.

    Perseverar significa no bajar los brazos, caer y volver a levantarse, volver a caer y levantarse una y otra vez, continuar a pesar de los obstáculos. Esta es la actitud que nos permitirá realizar nuestros sueños…"

    "Cualquier cosa que puedas hacer, o que sueñes que puedes hacer, comiénzala" (Goethe)

    "Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande; sólo es posible avanzar cuando se mira a lo lejos" (Ortega y Gasset)

el resto de los ingredientes..

    Ja! Seguramente habrás pensado: "Que iluso es este tipo! Si piensa que tener una actitud positiva le basta para conseguir lo que se proponga entonces va muerto". Y ¿sabes qué? Estabas en toda tu razón.
    No hay duda alguna: solo con actitud no hacemos nada. Es requisito necesario, pero no suficiente. Pero lo que sí es evidente es que si nos falta la actitud es realmente muy pero muy difícil que podamos lograr lo que pretendemos.
    El resto de los ingredientes no son ningún secreto. Vamos a tener que rompernos el culo en lo que hagamos. Vamos a empezar bien de abajo, siendo el "che pibe" y, desde ahí, empezaremos a escalar. Además, vamos a tener que hacer mil y un sacrificios que van a doler, y mucho. Esto implica estar muy seguros de nuestras prioridades. Y esto no es todo...
    Al esfuerzo hay que sumarle constancia. Si realmente deseamos que nuestro esfuerzo tenga su éxito, entonces debemos encargarnos de que sea cotidiano, persistente en el tiempo. Si no le damos continuidad de poco servirá.
    Y para terminar, el último ingrediente fundamental: el factor suerte. Lamentablemente la suerte es algo que no podemos controlar. Pero no por ello tenemos que alarmarnos. Es cierto que no podemos manipularla, pero te aseguro algo: mientras más nos esforcemos y más constantes seamos, más suerte tendremos.
    Igualmente, vuelvo a insistir con lo mismo que antes. Hay una cosa de la que estoy totalmente convencido: podemos laburar mas que nadie y ser constantes como ninguno, pero finalmente serán la actitud y la pasión los ingredientes que nos darán esa energía, ese empujón diario e imprescindible para no bajar los brazos.  
    Esta es mi receta, la que intento poner en práctica todos los días. La que aprendí de los que considero que saben, de esas personas que admiro y me encantaría poder imitar. Seguramente no sea la única receta. Quizá ni siquiera sea la mejor que existe. Pero hoy, entre todas las que conozco, es la que mejor se adapta a mis valores, a mi filosofía de vida. De hecho, te soy sincero, es la mejor receta que tengo para compartirte.

Entonces acordate:
PASIÓN + ESFUERZO + CONSTANCIA + ACTITUD + ESFUERZO + PASIÓN + ACTITUD + CONSTANCIA + ACTITUD + ESFUERZO  + PASIÓN + CONSTANCIA + ... + ... + ... + ... + ...+ ... + SUERTE

¿Cuál es tu límite?

Es impresionante la sutil diferencia que existe entre lo posible y lo imposible. Es simplemente una cuestión de actitud, un tema de cabeza. La famosa frase de Ford “Whether you think you can or you can’t, either way you are right” lo deja bien claro. Los que creemos que son nuestros límites terminan marcando definitivamente la frontera, y es por eso que solamente vamos a llegar hasta donde pensemos que podemos llegar. Mientras más lejos pensemos que podemos llegar, más lejos vamos a hacerlo. Contrariamente, si pensamos que no podemos llegar muy lejos, si no creemos en nosotros mismos, entonces vamos a terminar aterrizando enseguida.
Si bien es cierto que el hecho de que la gente crea en nosotros ayuda un montón, nos motiva, nos impulsa, nos entusiasma, también es cierto que si no somos nosotros mismos los que estamos real y completamente convencidos de que podemos alcanzar lo que queremos, entonces va a ser muy difícil que llegemos a buen puerto.
Igualmente, no es cosa fácil ser tan fuerte de cabeza. Es un laburo constante, una decisión diaria. Además, es importante tener en cuenta que son muchas las paredes que nos chocamos a lo largo de la vida, y esas frustraciones y decepciones no son menores. Si en esos momentos no somos fuertes de cabeza, es ahí cuando decidiremos bajar los brazos para siempre. Es por eso que, especialmente en esas etapas, es clave el concepto de resiliencia, que no es otra cosa que la capacidad de sopreponerse a las adversidades, de tomar tanto las cosas positivas como negativas, aprender y crecer con ellas, por mas duras que sean. Se trata de tomar los problemas, las caídas y las crisis como oportunidades.
Creo que el que tiene claras y frescas estas cosas puede proponerse cualquier cosa y conseguirla. Si logramos incorporar estos conceptos y empaparnos de esta actitud, nuestro límite no tendrá techo: será el cielo.